Con el
correr de los años trabajando como entrenador, no solo hemos podido enriquecer
nuestros conocimientos, sino por
supuesto adquirir una gran experiencia, conocer poco a poco la forma de pensar
de todos aquellos que quieren correr diferentes distancias, y no solo eso, sino
de cómo afrontar diferentes carreras.
A que vamos cuando decimos pensamientos
erróneos, ¿ cuánto tiempo necesito para preparar el 21k o mas aun el 42k?, “cuando empiezo a hacer fondo, no voy a
llegar” a eso se le llama ansiedad cosa que no veo mal siempre y cuando no
entorpezca nuestra preparación, los que entrenan en el cantero, saben bien que
no aplicamos recetas de cocina, no marcamos fecha de inicio para preparar una
prueba de tal magnitud, todo va a depender, de su historia deportiva, de sus
tiempos, de su carga horaria en lo laboral, de su compromiso familiar, y puedo
seguir enumerando una determinada cantidad de detalles, por supuesto que a
determinado nivel y con todo el tiempo a disposición para entrenar, esa si
sería otra historia, o sea otra preparación.
El resultado de un objetivo es el resultado de
todo el entrenamiento, sean sus fondos, sus cuestas sus intervalos, sus fartlek
etc. Está claro que puede faltar de uno y sobrar del otro a la hora de correr,
en eso está el acierto o el desacierto
del entrenamiento.
Algo parecido pasa con carreras especificas, “Se
viene la carrera de San Antonio” ¿Cuándo hacemos cuestas? Pensamiento erróneo,
y más aun comprobado que lo que desgasta mas nuestros grupos musculares es la
bajada y no la subida, la fuerza, no se trabaja la semana previa, la fuerza se
trabaja todo el año, hacer cuestas la semana previa a dicha carrera es
solamente para mentalizarnos, pero en sí, en lo que se refiere específicamente
al resultado físico es lo mismo que no las hiciéramos.
Se viene la San Fernando, “necesito
estar rápido quiero hacer pasadas” otro
pensamiento erróneo, la velocidad al igual que la fuerza se debe de trabajar
todo el año, las fibras rápidas son las que más cuestan preparar, son las que
con mayor frecuencia se deben de entrenar, o sea no será de gran resultado ponerse a hacer intervalos días previos a
carreras de terreno rápido. Tanto la
fuerza o la velocidad, lo que hacemos días previos a objetivos específicos es
puesta a punto.
Planificación, esa es la palabra, la
cual no es lo mismo que receta de cocina, cosa que solos muchas veces no hacemos,
detalles y entrenamientos, que fortalecemos
con el entrenador o con el grupo, de nuevo vuelvo a repetir no quiere
decir que el que entrena solo o que no tiene entrenador, le vaya mal, nada que
ver, le puede ir muy bien, tal vez le
cuesta un poco más que al resto, meramente por un tema motivacional.
Estos son algunos consejos los
cuales comparto con todos los lectores de nuestra página.
Mauricio Ramírez
Técnico Deportivo Atletismo
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